miércoles, 11 de agosto de 2010

CON ASISTENCIA DE LA COMUNIDAD WAYUU, COLDEPORTES LLEGA A CUATRO MIL PARTICIPANTES EN ESCUELA VIRTUAL DE DEPORTES

Con el atuendo típico de la mujer wayuu, la manta o Ashein, Dairis Uriana Pushaina, se convirtió hoy en la participante número cuatro mil del programa Escuela Virtual de Deportes que adelanta el Instituto Colombiano del Deporte COLDEPORTES en todo el país, y que llegó a Manaure, La Guajira, llevando la técnica de la práctica deportiva a través de internet.

Dairis Uriana participó en este programa junto con otros 94 alumnos de los colegios Institución Etnoeducativa Técnica Eusebio Septimio Mari, Colegio Sagrado Corazón de Jesús y la Institución Educativa Urbana Mixta Número Uno del municipio de Manaure; a donde la Unidad Móvil de la Escuela Virtual de Deportes llegó hoy con lo más novedoso de este portal educativo único en América Latina.

“Este programa nos ayuda a interactuar con el mundo del internet, enseñándonos a manejar una plataforma virtual”, señaló

“Esta escuela es una base para poder continuar con los deportes en el colegio, con la organización de los juegos, implementarlos más y poder ganar más credibilidad en el deporte”, anunció.

Dairis hace parte de la organización de los juegos internos de su institución educativa y no duda que gracias a la Escuela Virtual de Deportes alguno de sus compañeros tome este tipo de capacitación para convertirse en deportista.

“Contamos en el colegio con algunos alumnos que tienen grandes capacidades y demostrar que sí se puede”. Manifestó.

A manera de mensaje Dairis invitó a toda su comunidad a participar de este programa nacional de COLDEPORTES.

“Entren, ingresen a este programa que es una oportunidad que antes no teníamos y que ahora debemos aprovecharla ya que nos va a servir mucho para nuestro desarrollo como deportistas”, añadió.

De esta manera la Unidad Móvil de la Escuela Virtual de Deportes, luego de visitar 44 municipios de ocho departamentos, avista el Mar Caribe, justo al frente de Las Salinas de Manaure donde alrededor de cuatro mil hectáreas de un paisaje blanco producto de la extracción de sal, contrasta con el imponente océano y la fresca brisa que allí se encuentran.

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